Elenita quería ser sopladora de vidrio, igual que su papá. Pero su papá puso el grito en el cielo y dijo que de eso ni hablar. Así que a la niña no le quedó más remedio que emprender un largo viaje lleno de aventuras sólo para conseguir su anhelado sueño. Y al volver?
Elenita quería ser sopladora de vidrio, igual que su papá. Pero su papá puso el grito en el cielo y dijo que de eso ni hablar. Así que a la niña no le quedó más remedio que emprender un largo viaje lleno de aventuras sólo para conseguir su anhelado sueño. Y al volver?
Subscriu-te al nostre butlletí
Subscriu-te i rebràs totes les nostres novetats. Cero SPAM, només continguts de valor.